Fuente can fabra

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Plaza de Can Fabra-Barcelona

viernes, 20 de julio de 2012

Luces y sombras



"Maldita seas! - Winnie, diablo de... - Yo te..." "¡Bah!", la empujó sin miramientros y ella cayó a sus pies hecha un ovillo. Roy Fleming lo había presenciado todo. Vió cómo su propia mujer era tratada de ese modo por un hombre que no era más que un maníaco. Su mujer, que una hora antes le había besado mientras se detenía tiernamente junto a la delicada cuna donde dormía el centro del universo de ambos.
Hacía casi una hora, y ahora la veía como el objeto postrado del desprecio de otro honbre, el rehusado juguete de la pasión salvaje de un malvado.
Ella se puso de rodillas y abrió sus delicados brazos dirigiendo una llamada apasionada al hombre que la había desdeñado.
"Arnold, ¿no lo comprendes? Nunca la habías amado.
Sólo fue un capricho fugaz, una locura pasajera. Es a tí a quien quiero. Piensa en los días de París. ¿Te acuerdas cuando nos fuimos juntos? Arnold, tú y yo (...)."
El hombre cruzó la habitación, se apoyó en una mesa no lejos del sitio donde ella había estado hecha un ovillo mientras la escrutaba con una mirada de la que ella quiso sustraerse.
"No", dijo amargamente. "Nunca lo he olvidado!"
Ella, arrodillada todavía, se le acerca y le pone una mano en la rodilla: "Arnold, ¿no lo comprendes? Debo abandonar Inglaterra inmediatamente. Tengo que ir a esconderme a algún sitio -donde sea- muy lejos de aquí.  La he matado, Arnold, por tí. La he matado porque ella te había apartado de mí. Dirán que es un asesinato, pero poco importa si tú vienes conmigo. En otro país partiremos de cero -juntos-; tú y yo".
Roy Fleming lo vió y lo oyó todo.  Esa asesina repudiada era la mujer que él había jurado amar y honrar hasta que la murerte les separase. Así era, sí, y más aún. Pero Roy permaneció inmovil.
¿Inflexible, atenazado por el horror de la escena o recién enterado de su propia impòtencia?
El hombre al que ella llamaba Arnold la incorporó de repente y la atrajo hacia sí con un impulso apasionado.
"hay algo en tus ojos, dijo con dureza, que haría huir a casi todos los hombres. Ese algo está vivo y es una de las razones de que te desee. Tienes razón Winnie. Estoy listo" (...) Ella se apretó contra él y los labios de ambos se unieron en un largo beso entrecortado por  sollozos.
Y Roy Fleming seguía sin reaccionar. No levantaba un dedo por defender el honor de su esposa. No pronunciaba una sola palabra acusadora. No intentaba vengarse del hombre que le había robado el amor de esa mujer. ¿Acasono le importaba? No, no se trataba de eso. ¿No lo entienden? ¡Simplemente estaba sentado en la segunda fila de la platea!

                                                             *************

Este texto, fue escrito por Hitchcock, para el número de septiembre de 1919 del Henley Telegraph, una publicación interna realizada por los empleados de la firma londinense para la que trabajaba antes de entrar en la industria cinematográfica. se encuentra reproducido en el libro de Patrick Mcgilligan, Alfred Hitchcock, una vida de luces y sombras (2003)

A mí me sorprendió el final. Espero que os guste.

20 comentarios:

  1. Cuando empecé a leer ese texto, por su semejanza, creí que se trataba de un pasaje de "TESS OF THE D'URBERVILLES", la novela de Thomas Hardy que Polanski llevó a la pantalla en 1979. Bueno, luego llegas y nos lo aclaras.
    La verdad es que quedaba muy moderno en 1919 esa intuitiva propuesta de puesta en escena de un film (una especie de metalenguaje) cuando ese film aún no existía porque el cine casi se estaba inventando en aquellos momentos. En cualquier caso, parece ser que por esa época el jovencito Alfred aún no tenía claro lo de las ventajas del "suspense" sobre la "sorpresa", como él mismo reconoció muchos años después cuando ya sabía muy bien cómo hacer películas.
    Un abrazo.

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  2. Pues me ha encantado Selegna. Un final típico de Sir Alfred. Anotamos la recomendación de ese libro. Saludos!

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  3. Hola, Teo: No conozco la novela que mencionas. Me encontré con este texto, y aunque tienes razón en que el suspense es mejor que la sorpresa, a mí me gustan las historias con final inesperado; por ejemplo en microrrelatos es muy común encontrárselos y a mí me gustan. Por cierto la película de Polanski ¿Es buena?
    Un abrazo y gracias por comentar

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  4. Hola, Marcos: Me alegro que te haya gustado y que hayas tomado nota del libro. Me pareció una "rareza" del maestro Hitchcock y quise compartirla. Gracias por la visita!
    Saludos tambien para tí

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  5. Qué rarito ha sido Hitchcock de siempre... ;)

    Me ha gustado el relato, y verte por aquí de nuevo también.

    Un abrazo.

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  6. Cuando empiezas a leer este texto, parece que sea el argumento de una peli de cine negro tipo La mujer del cuadro. Ese final es sorprendete. El maestro ya apuntaba maneras.

    Un beso.

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  7. Hola Mara: Se ve que se aburria en aquel trabajo y quiso animarlo un poco escribiendo estos textos; porque supongo que habrá más. Yo tambien me alegro de verte por aquí. Gracias por comentar.
    Un abrazo

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  8. Es lo que me ocurrió a mí, Myra; con ese comienzo, pense: A ver como lo resuelve! Por cierto, ya que la citas, ¡que buena, "La mujer del cuadro"! y mejor todavía "Perversidad".
    Gracias por pasar por aquí.
    Un beso

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  9. Me ha gustado el texto, empieza algo confuso, muchos personajes (tres parejas) y sub-tramas, la mujer engañando a su esposo, la mujer rechazada, la mujer matando a la mujer del amante, pero luego se comprende todo, muy bien escrito, también se siente la emoción de la imagen a la que remite, la separación, el desprecio y huida dentro de una pasión, muy interesante lo que has puesto. Me gusta Hitchcock, es un autor que incluso veía en sus historias de tv hace muchos años sin saber de su fama. Como se dice actualmente de Nolan, una cine comercial inteligente aunque con otras características. Un abrazo.

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  10. Bueno, bueno, querida selegna, la cantidad de cosas que nos estás descubriendo del maestro británico :P

    Un abrazo.

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  11. Hola, Mario: A mí tambien me llamó la atención al empezar a leer, porque creía que se trataba de un argumento típico del cine negro y me imaginé que el narrador hablaba de un marido sorprendido por la infidelidad de su esposa. Y al final siempre es él (Hitchcock) quien nos sorprende.
    Gracias por tu comentario
    Un abrazo

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  12. Estimado Ricardo, me alegra verte por aquí. Ya ves, que buscando algo interesante, siempre me encuentro con Hitchcock. Espero no aburrir, porque lo siguiente, aunque indirectamente, también tiene algo que ver.
    Gracias por comentar! Un abrazo

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  13. Así, no es un tipo, Roy Fleming que su esposa lo engaña con Arnold, no? explícame entonces que eso he leído y eso es lo que veo. Un abrazo.

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  14. No, Mario; Roy Fleming, es un espectador que está sentado en la platea de una sala de cine y naturalmente no reacciona y siente impotencia porque no forma parte de la historia que está contemplando; te lo aclara en el último párrafo; si ahora vuelves a releer, lo verás enseguida.
    Gracias de nuevo. Un abrazo

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  15. Selegna, es precioso el relato de Hitch, una mezcla de historia de amor y suspense pero con mucho morbo a la vez, la sorpresa final del relato es típica del maestro, pero nunca jamás he leído nada suyo, eso sí sus pelis pienso que todas. Ya adivino una prosa un tanto cinematográfica, por los dialogos, no sé ?
    si de hay sacaría alguna idea para sus cintas posteriores, si alguién me lo puede aclarar.... un post precioso, estoy encantada de leerte, soy sincera.Nos iremos conociendo, estoy segura...

    Un besote querida Selegna.

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  16. Ante todo discúlpame, Susan, por la tardanza en contestar, pero es que cambié el escritorio y me lio un poco hasta que me acostumbre, así que no he visto tu comentario hasta ahora. me alegro que te haya gustado el relato; a mí me pareció interesante por ser algo anterior a sus películas. Pienso que ya entonces, él pensaba y escribía cinematográficamente, pero concrétamente esta historia no me suena de ninguna de sus películas. a lo mejor alguien por ahí puede aclararnoslo a las dos. Ah! y no dudo que seas sincera. A mi me gusta serlo siempre.
    Gracias por tus palabras y otro beso para tí.

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  17. Hola, selegna. He venido hasta aquí un poco preocupada por tu larga ausencia. Ahora veo que hace pocos días has respondido un comentario así que esa ausencia supongo que es voluntaria.

    Se te echa de menos. Espero que todo vaya bien.

    Un beso

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  18. Gracias, Myra, por tu interés, que sé que es sincero. Tienes razón; estoy tardando demasiado en publicar. Las razones son, falta de tiempo y bastante también de orden técnico, porque "la vista previa" me presenta las cosas distintas a como yo las quiero poner y aún no he descubierto el motivo. La entrada que estoy preparando es de arte, pero también está relacionada con el cine. Espero poder publicar en breve.
    Gracias de nuevo! Es agradable sentir que le echan a uno de menos.
    Otro beso para tí

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  19. Pues me ha encantado... y no lo conocía. Me apasiona Hithcock aunque hay tanto material que lo fácil es perderse... pero perderse para bien. Besos Selegna.

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  20. Hola, Emilio: Veo que te ocurre como a mí, que me encanta Hitchcock. Recopilo todo lo que me llama la atención sobre él y siempre descubro algo nuevo. Me alegro de haberlo compartido con vosotros.
    Gracias por pasar por aquí. Besos para tí también.

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